Estoy leyendo "La vida que pensamos" de Eduardo Sacheri y en su cuento "Un verano italiano", hace mención más de una vez a un árbitro mexicano, que según él perjudico a Argentina, expulsando a dos jugadores y cobrando un penal dudoso que le dio el triunfo a Alemania en el mundial de 1990 en Italia.
El tema es que recordé que lo conocía por los dos partidos que jugamos contra los árbitros Uruguayos, el primero lo jugamos en Defensores Sporting de Montevideo y ganamos 1- 0, dirigió Roberto Goicoechea y el segundo en la cancha de Vélez Sarsfield en 1979 y ganamos 5-1.
El tema es que el portero de ellos era Edgardo Codesal, hijo del árbitro José María Codesal, nacido en Montevideo con un abuelo Argentino y que emigró para México en 1982, representando a este país como árbitro de la CONCACAF.
Aprovecho para decirles que teníamos un equipazo a saber: Torti; Rocha; Calabria; Lamolina; Balbona; Loustau; Mastrangelo; Biscay; Quirós; Ibarra y Moscateli. El DT era Luis Espineto y ayudante Farias. Además de entrenar para nuestra función, jugábamos casi todos los martes en Sacachispas. Fueron más de diez años de placer absoluto y grandes compañeros.