sábado, 10 de junio de 2017

Malas noticias

Esta semana fue pésima en noticias, se ha ido quién para mí fue el mejor árbitro de mi etapa en el referato Arturo Ithurralde y con el que tuve algunas anécdotas, que vinieron a mi cabeza de inmediato, recuerdo en la cancha de Boca donde por primera vez ví a un árbitro al término del primer tiempo, tomar un caldo salado que traía en un termo, para hidratarse y porque hacía frío, era previsor y controlaba todo.
Otra quizás la más asombrosa, en la cancha de Lanús, dirigí el preliminar, siempre nos duchabamos rápido e íbamos a ver el partido, cuando termina el primer tiempo bajamos a buscar los bolsos y me dice: Balbo estaban en la sexta fila del centro del palco; increíble controlaba todo, realmente lo admiraba porque era además una excelente persona.
Hoy me acaba de avisar un colega que murió Ricardo Calabria, sabía que hace tiempo tuvo un accidente de moto en Turquía, por otro colega al que le pregunté,  que estaba en estado vegetativo y que quizás haya encontrado el descanso.
 Pero pasamos tanto tiempo juntos, en entrenamientos, en partidos de fútbol del seleccionado de árbitros, en viajes y quizás ahora lo pueda decir le debo haber subido algún escalón en el arbitraje, porque le confié que lo dejaba y me dijo que esperara, ese año ascendí de categoría.
Ricardo es la persona más vital que he conocido, fuerte física y mentalmente, con muchísimos proyectos me había propuesto hacer juntos el curso de DT antes de mi venida a España, hace ya tres años estuvimos juntos en la fiesta de árbitros, como siempre alegre, feliz, no merecía ese final.
La vida me ha regalado conocer infinidad de personas, por las distintas actividades que he realizado, pero el fútbol me regaló el placer de disfrutar del juego y de los amigos; compañeros de esfuerzos; de muchísimas alegrías; de muchísimo esfuerzo; del placer del triunfo y el amargor de la derrota.
Después de lo de Arturo me pasé pensando en Ricardo y hoy lloro por los dos.
Q.E.P.D. se lo merecen.